“El nombre que se le otorgó fue Senderos de San Isidro; no es un nuevo barrio; es un Centro Poblado, ahora reconocido de manera legal para que tengan todos los derechos de titulación de sus predios y de inversión de la Alcaldía en su sector”: Daniel Bernal, alcalde de Funza.
Corrían los años 60 cuando se estableció la primera familia en San Isidro, un sector veredal en lo que antes se conocía como Siete Trojes, en el municipio de Funza, departamento de Cundinamarca. Desde entonces, los Gutiérrez y los Cifuentes, las dos familias más representativas del lugar, han luchado por establecerse formalmente en el territorio, sueño que se hizo realidad este domingo, 7 de noviembre, tras firmarse la declaratoria de asentamiento de Senderos de San Isidro.
“Ellos habían comenzado con el proceso de legalización de manera formal hace 15 años, que es lo que lleva de constituida la Junta de Acción Comunal (JAC) de San Isidro. Y desde ese tiempo dieron la lucha con las diferentes administraciones, pero no se había logrado la declaratoria de Centro Poblado”, explica Daniel Bernal, el alcalde que los escuchó, les dio su palabra y les cumplió.
“Esto los beneficia a todos ustedes, la titulación, la posibilidad de gestionar proyectos ante la Alcaldía, este es un escalón que ustedes han avanzado para poder construir más sueños. Con esto no acaba nuestro Gobierno, nos quedan dos años y dos meses para hacer muchas más cosas por Funza y por ustedes”, agregó el alcalde Bernal Montealegre.
Y es que, según expone Melissa Sánchez Franco, arquitecta de la Secretaría de Planeación y Ordenamiento de Funza, con la formalización de este asentamiento humano el predio es incorporado al perímetro urbano del municipio, pasando de ser área rural a urbana, con lo que las familias obtienen beneficios como: manejo de sus bienes, legalización de su terreno, infraestructura vial, servicios públicos y acceso a mejoramiento de vivienda, entre otros.
“Antes no existíamos, no éramos nadie”: Édgar Gutiérrez
“No éramos nadie, no existíamos, por eso, hace 15 años decidimos hacer nuestra Junta de Acción Comunal. Antes nos negaban desde un subsidio hasta un préstamo; ahora somos dueños de nuestro pedacito de tierra”, cuenta con devoción don Édgar Gutiérrez, presidente de la JAC Senderos de San Isidro, al recordar cuál era la situación de su comunidad.
Lo que viene para la Administración Municipal, después de esta legalización, es un reto mayor: lograr el mismo hito para los habitantes de las veredas El Coclí y La Florida.
Objetivos de la legalización
- Aprobar los planos urbanísticos y expedir la reglamentación urbanística del asentamiento.
- Asignar usos y establecer la localización de espacios públicos para propiciar la conservación y mejoramiento de los modos de vida urbanos.
- Reconocer, delimitar y normalizar el asentamiento humano.
- Recuperación y sostenibilidad sobre las áreas públicas, generadas en el asentamiento.
- Incentivar a las entidades correspondientes, para garantizar la prestación efectiva de los servicios públicos domiciliarios en el asentamiento.
- Reconocer la existencia del asentamiento humano denominado “Senderos de San Isidro”.