El telescopio, tipo Schmidt Sassegrain computarizado, de 14 pulgadas, está equipado con lentes y cámaras para registro fotográfico y será importado de Estados Unidos. Se encuentra ubicado en el edificio polivalente San Patricio, en el que se invirtieron más de $3.000 millones.
Los observatorios astronómicos son centros de investigación y estudio del cielo, cuya función es la de investigar, recoger y analizar los fenómenos celestes. Precisamente, con este objetivo, en el municipio de Funza se instalará el primero del departamento de Cundinamarca. Estará ubicado en el recientemente inaugurado edificio San Patricio, obra de infraestructura que contó con una inversión de $3.395 millones, con un enfoque polivalente, es decir, varias funciones, entre ellas, ser un espacio de aprendizaje para la educación superior de los estudiantes funzanos.
La obra consta de cuatro niveles: en el primer cuenta con amplias zonas públicas, en el segundo se encuentran un Punto Vive Digital y el Centro Interactivo Cultural (Cilab), un aporte de Colsubsidio que le dará empleo a más de 40 personas y beneficiará cerca de 3.000 estudiantes; en el tercer piso, estarán las zonas de exposiciones y administrativas, con puntos de atención especial para la comunidad.
“El piso principal tiene una amplia plazoleta, una zona urbanística con áreas de esparcimiento y jardines. Este espacio conecta con el edificio de al lado, el Banco de Alimentos; y nuestro objetivo será intervenir la parte de en frente, donde están ubicados diferentes locales comerciales, con el objetivo de hacer un gran paseo peatonal para la ciudadanía”, añadió Bernal.
Actualmente, la plaza urbana cuenta con 660 m2 y un mobiliario innovador de materas redondas tipo bancas, luces con paneles led alimentadas por radiación solar y un gran mural informativo. Además, como intervención de urbanismo táctico, la Alcaldía mejoró el entorno visual del gabinete de inspección telefónica, que estaba en el lugar, inspirándose en la ciudad de Londres.
Un edificio que le apuesta a la primera infancia
Más de $140 millones han sido destinados para la compra de 160 elementos de aprendizaje, entre los que se encuentran: guantes de textura, cubo de vida, centro de actividades suaves, sonajeros de pulseras, rompecabezas en espuma, gusano de estimulación, caja de sorpresa, bola gateadora, pelota sonora para niños con discapacidad visual, gimnasio infantil y túnel de arrastre. Este piso, que se convierte en la ludoteca municipal, ya está abierto al público, junto con todo el edificio.