Grupo armado ilegal amenaza de muerte a personas firmantes del Acuerdo de Paz en Mesetas

Ex-FARC guerrilla commander and current member of the political party that uses the FARC acronym but operates under the name Alternative Revolutionary Force, Pastor Alape (R), speaks during a press conference about the murder of Alexander Parra, ex-combatant of Farc, murdered last thursday inside of the Territorial Area of Training and Reincorporation (ETCR, acronym in Spanish) in Mesetas, Meta department, in Bogota on October 25, 2019. (Photo by Raul ARBOLEDA / AFP)

El 14 de marzo, un grupo armado ilegal envió amenazas contra la vida de los firmantes del Acuerdo de Paz y sus familias en el Espacio Territorial de Reincorporación (ETCR) ‘Mariana Páez’, ubicado en el municipio de Mesetas (Meta). Ante estos hechos, la Defensoría del Pueblo ha condenado públicamente las amenazas y ha instado a las autoridades locales y nacionales a tomar medidas para garantizar la protección de estas personas.

El ETCR ‘Mariana Páez’ alberga a 200 familias, incluyendo 86 mujeres cabeza de familia y 80 niños, algunos de ellos con discapacidad y adultos mayores. La Defensoría del Pueblo considera que es urgente proteger a esta población y garantizar que puedan continuar con sus proyectos de vida en sociedad.

La Defensoría del Pueblo ha enviado personal de la Regional del Meta y la Dirección Nacional de Atención y Trámite de Quejas al territorio para buscar la activación de los mecanismos de alerta y respuesta rápida por parte de las autoridades. Además, ha pedido a la Unidad Nacional de Protección que refuerce las medidas de protección de esta población, teniendo en cuenta su especial vulnerabilidad y enfoque de género y diferencial.

La entidad ha calificado estas amenazas como “un ataque a la médula del proceso de paz y su implementación”, y ha advertido que la orden de abandonar el ETCR implica la vulneración de los derechos humanos y del Derecho Internacional Humanitario. El desplazamiento forzado de las personas que viven en el ETCR causaría el abandono de los proyectos productivos que emprenden desde hace seis años, y les restaría posibilidades en su proceso de reinserción social y normalización de sus economías.

La Defensoría del Pueblo hace un llamado a los actores del conflicto para que respeten los términos del Acuerdo de Paz y dejen de lado a la población civil, especialmente a las Personas en Proceso de Reincorporación (PPR) que buscan nuevos inicios personales, familiares y económicos.